Como parte integrante de la inmensa ignorancia que
me embarga sobre lo que es y entraña la aplicación de las leyes tanto a nivel
nacional, como internacional e individual y/o colectivamente. No puedo menos
que preguntar y preguntarle a quien respuesta pueda darme, qué están haciendo
los fiscales o corporaciones de dichos cargos a todos los niveles, desde los:
juzgados penales de 1ª instancia, locales, provinciales, cantonales o autonómicos.
Nacionales o tribunales supremos e incluso ese de carácter plurinacional
dependiente de la ONU o de la OTRA, que responde al pomposo nombre de Corte Internacional de Justicia, aunque
por su pasividad y actuaciones, más pareciese que es de “MANGAS”.
Quizás como persona, teóricamente libre y
en posesión de todos los derechos y obligaciones que encierra el pertenecer a
esa comunidad, que se engloba bajo las siglas de CEE, me sienta una vez más
menoscabado en los elementales principios del derecho, o al menos, como yo los
interpreto. Mi derecho
fundamental, al de mi propia la vida, derecho éste, que mor a la mala fe mostrada y
demostrada por los dirigentes de la China Comunista, fue conculcado de forma
directa y contundente, cuando consciente
y de forma mal intencionada, ocultaron deliberadamente la contaminación masiva de
sus “súbditos”, por el hoy denominado “coronavirus”.
Dado
el número de teóricos ciudadanos, no supuestos súbditos, fallecidos a estas
alturas del mes de marzo de 2020. En esa mi condición ya invocada de ciudadano,
no súbdito (salvo de la voracidad de la hacienda pública), por pertenecer a esa
amplia capa social de la “tercera edad”, con el adicional de “enfermo crónico”,
me permito sugerir a todos aquellos que me lean, que se consideren libres y ciudadanos, no súbditos, expandan el contenido del presente, pues de
ser cierto lo que dice la Constitución Española de 27 de diciembre de 1978, al
día de hoy vigente, en su artículo 124, que transcribo textualmente: “El Ministerio Fiscal.- Artículo 124.-1. El Ministerio Fiscal,
sin perjuicio de las funciones encomendadas a otros órganos, tiene por
misión promover la acción de la justicia en defensa de la legalidad, de los derechos de los ciudadanos y del
interés público tutelado por la ley, de oficio o a petición de los
interesados, así como velar por la independencia de los Tribunales y procurar
ante éstos la satisfacción del interés social.- 2. El Ministerio Fiscal ejerce sus funciones por medio de órganos propios
conforme a los principios de unidad de actuación y dependencia jerárquica y con
sujeción, en todo caso, a los de legalidad
e imparcialidad”. Puesto que
de oficio no actuó, ni va a actuar, debemos presionar dentro de las
posibilidades de cada uno de los potenciales ciudadanos, no súbditos, para que
cumpla con sus cometidos: actuando en primer lugar y en la forma y manera que
corresponda, contra los encubridores de la detección en primera instancia de
la enfermedad del coronavirus, en origen, autoridades comunistas chinas. A nivel nacional, aquellas autoridades que conociendo de antemano la pandemia
a la que nos estaban exponiendo, fomentaron y autorizaron convocatorias
multitudinarias de personas, bajo las más “partidistas y folclóricas citas”. A
aquellas personas que ostentando cargos de representación política, de forma
reiterada y reiterativa rompieron al día de hoy, las normas por ellos mismos
impuestas del “aislamiento o cuarentena”. Petición de indemnizaciones millonarias
en primera instancia a esas autoridades chinas culpables de la ocultación de la
inicial pandemia. Consiguientemente a las nacionales reincidentes en la dejación
de funciones y mal ejemplo dado en la actual situación de cuarentena.
Mientras
alguien no me demuestre lo contrario, tengo que creer en una “CONJURA” y no de
necios, sino de desvergonzados vendidos ideológicamente a esa ideología totalitaria
que convierte en súbditos a las personas, engañándoles bajo siglas y acrónimos
tan altisonantes como ONU, OTRA, CEE y todas esas covachas de vividores por
cuenta ajena, que nos conducen con su inacción a que nos dejemos morir, en aras
a que ellos sigan viviendo del cuento y a nuestra cuenta.
HIJOS, NIETOS, VIUDAS Y DEMÁS DEUDOS DEL DENOMINADO MUNDO LIBRE, PIDAN LAS INDENNIZACIONES QUE
LES CORRESPONDEN POR EL ASESINATO ORQUESTADO POR LA MALA FE DEMOSTRADA CON LA
OCULTACIÓN DE LA APARICIÓN DE LA HOY PANDEMIA DE “CORONAVIRUS” QUE NOS ASOLA.
Capt. Willie
No podría estar mas de acuerdo con usted.
ResponderEliminar¿Es factible una reclamacion economica?
La reclamación internacional es posible y factible, dado el delito que cometieron ocultando la existencia del virus y rapidez de propagación, disponiendo de distintos informes científicos de carácter público que acreditan cinco meses de antigüedad en el conocimiento por parte de las autoridades comunistas chinas, su real e interesada ocultación y la pandemia que trasmitieron al mundo, con miles de muertos.
EliminarEn lo concerniente a la reclamación a los mandantes y no gobernantes españoles, en el momento que dispongamos de un abogado internacional dispuesto a llevar el caso, tendrán mucho que explicar y posiblemente que pagar.
En el mundo tenemos los antecedentes de los efectos del tabaco y de ciertas contaminaciones de aguas continentales, en España las sentencias contra empresas por los desconocidos efectos del amianto.
Esto es cuestión de irlo preparando y poniendo al máximo de "difuntados", hacer la reclamación y cuando existan sentencias contra china, realizarle embargos preventivos sobre bienes en los países por ellos diezmados en base a su nefasta y cobarde actuación. Actuación en la que hay que unir como alcahuetes necesarios a los mandantes y no gobernantes.
La propagación de la pandemia, es achacable a ellos (a las autoridades chinas) por no comunicarla en tiempo y forma.
Por sí a mí me llega la "china", estoy trabajando para crear las bases de una organización que aglutine a las familias de los afectados por tamaña "cabronada", para tratar de poner a cada uno donde debe y que pague. Incluidos esos desvergonzados mandantes nacionales.
COMO ADENDA A LO ANTERIORMENTE DICHO:
ResponderEliminarCon la lógica y clara desvergüenza a la que hace siempre honor (caso de que supiese lo que significa dicho concepto) todo maligno comunista, hace 60 horas aproximadamente, el desvergonzado Presidente de la Cruz Roja China, de visita en la ciudad italiana de Milán, se permitió aseverar, sin que nadie le “corriese”, qué los efectos tan negativos de la pandemia por ellos ocultada y exportada a Italia y resto del mundo, es consecuencia directa del incumplimiento por parte de la ciudadanía italiana, de las restricciones circulatorias de personas y los amplios servicios públicos establecidos.
Los mal pensados y conocedores del “paño comunista”, caso del que suscribe, se atreven a afirmar, que es preciso colapsar occidente, para poderlo comprar de saldo…
Más que nunca veo necesario el asociacionismo a nivel occidental, para exigirles nos indemnicen por nuestros muertos. Ellos pusieron en circulación el virus, nosotros los muertos y la ruina económica.
¿Dónde están esos dirigentes que dicen velar por nosotros? Haciendo bueno el principio de mandar y no gobernar.