Desde siempre la
“memez”, como sinónimo de estulticia, me cayó un tanto “gorda”; pero cuando
ésta se asoció para dar como resultado el actual, “Estulto Pijo Progre”, como acrónimo de majadero, con ínfulas de culto y “absolutista –
tolerante” (agarra esta mosca por la pata trasera izquierda…). Eso pasó a ser
el “acabose” y no más.
El revés político de la no liquidación del “Ovamacare”,
fomenta el indudable sueño de derrocarle, en los unos por la vía violenta, en
los otros por el impeachment y en los de más allá en base a bulos. Lo cierto es
que el “cutre” constructor de Queens N.Y. se les está resistiendo. De nada les
valió, al menos hasta ahora, el desvergonzado acoso al que sometieron a su Sra.
Esposa e incluso a su hijo menor. Y todo por parte de esos presuntuosos de las “buenas
formas”, la “tolerancia” y el “buen rollito”. Claro, Mr. Trump tuvo la osadía
de arrebatarles algo suyo (de ellos) ¡La Casa Blanca!
Por el momento: dos a uno a favor de Mr.
Trump. La cara que muestran al día de hoy todos esos “mamarrias de la cosa
pública”, no difiere en demasía, de la inolvidable, mostrada en la CNN la noche
– madrugada del pasado día 9 de noviembre.