Habían de
pasar unos cuantos años para que el Sr. Presidente del Consejo de Ministros, de
este viejo y envejecido país, antes llamado España, adoptase como forma y
manera de hacer política, el “esperpento” en íntima combinación con el
“tancredismo”. Nacido el primero de su paisano D. Ramón José Simón Valle Peña,
conocido en el mundo literario, como D. Ramón María del Valle – Inclan. No teniendo tan clara la
paternidad del segundo, aunque sí su práctica contemporaneidad con el anterior,
causando verdadero furor ambos en los “ruedos ibéricos” de principios del siglo
pasado, aunque sí menos desasosiego que en la actualidad, cuando quien lo
practica tiene la ineludible responsabilidad de gobernarnos.
Lejos del ánimo del que suscribe de sentar catedra alguna, para aquellos a los que les pueda quedar alguna duda sobre el uso de los términos anteriormente entrecomillados, paso a aclarar los siguientes extremos:
Esperpento: género teatral creado y recreado por
“D. Ramón María de Valle-Inclán” en que se deforma sistemáticamente la
realidad, exagerando sus rasgos grotescos y absurdos.
Tancredismo: (de D. Tancredo) Actitud del político o gobernante
que no reacciona ante los problemas que suceden a su alrededor.
Tras las anteriores aclaraciones, ¿alguien
puede encontrar mejor y más clara definición del hacer político de D. Mariano
Rajoy Brey? Es inminente que el enunciado de la famosa Ley de Murphy, es célebre
por la primera parte de su formulado, pero… hay que tener en cuenta… Que si bien toda situación susceptible de empeorar, empeora, pero ojo… siempre alcanza
un momento, en el que ya no es capaz de empeorar, y venciendo la inercia, espontáneamente
mejora… Mal que le pese a ese asiduo “leedor” del Marca, las mejoras
experimentadas en España, si es que hubo alguna, se pueden achacar directamente
al propio Murphy. Nunca y en ningún caso a él y a esa troupe de la que se
acompaña. ¿Espera que el problema de Cataluña y los Golpistas se solucionen por
sí solos, mor al desarrollo de este ineludible enunciado…?
Su capacidad política de no hacer nada,
queda manifiesta una vez y otra y otra y hasta el infinito. Cuando en su inicio,
en la transición a la oposición, tras el mayor atentado terrorista sufrido por
nuestro país, pasó por carros, carretas, camiones y tristemente por trenes, permitiendo
todas y cada una de las “machadas” que se le ocurrieron al Sr. Rodríguez
Zapatero y a sus “boys” (recuérdense los calzoncillos superpuestos, etc., etc.);
no conforme con ello, cuando llega la transición o cambio de gobierno, para “redondear
la jugada” (creo expresión ésta del Marca) le condecora. Permitiendo además, la
continuidad en cargos de representación, de designación directa a auténticas
indocumentadas. Políticas ellas al borde del analfabetismo total, con necesidad
de traductores en organismos allende nuestras fronteras.
Con mayoría absoluta en ambas cámaras,
incumple todas las promesas electorales que lo llevaron a ella, permitiendo el
adoctrinamiento, a costa de todos los españoles, de ciertas CC.AA.,
subvencionando y premiando la insolidaridad y la falta de respeto a todo el
pueblo español y a la constitución política que nos dimos y que él y la troupe
de la que se acompaña, solemnemente juró cumplir y hacer cumplir.
El colmo del colmo y casi colmado, es
cuando por dos veces, afirma que no habrá referéndum en Cataluña. ¡Claro que lo
hay! No hubo un tercero, porqué a la vista de su total pasividad, los
indeseables afanadores de lo ajeno, decidieron dar el salto adelante y entonces
intervino la justicia. Pero tampoco estamos libres de que lo haya en un futuro
inmediato, salvo que él y la troupe de que se acompaña sean desalojados del
desgobierno al que están sometiendo a nuestro país.
Que él,
su acólita, la escasa de estatura física, alta en ambiciones y total carencia del mas elemental sentido
de concepto histórico alguno de nación, acompañados por otros inútiles,
tipo a aquél que se permite hablar “del Cs” tras haberles dado un “revolcón”
como el que les dieron y, el que les darán de forma inminente en las próximas elecciones;
muestran bien a las claras, que no solamente adolecen de algo tan elemental
como el más básico sentido del ridículo, si no que hacen gala de carecer de
algo mucho más fundamental: el
sentido transcendental de la patria, concepto éste, que según aseveración de D. Manuel Azaña “NO ES UN MITO”. Aunque por todo lo que
se ve, pareciese que para ellos sí lo es.
Esperemos y veamos a corto plazo las
continuas demostraciones de pantalones y bragas bajados. A olvidadizos o
ignorantes oportunistas hablando de impuestos anti constitucionales. A la vez que
seguiremos financiando golpistas y medios de difusión “pro golpes programados”.
Capt. Willie
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