sábado, diciembre 01, 2018

Cuando se carece de principios, los fines siempre son espurios…


    Entre otras muchas frases dignas de toda consideración y profundo estudio, Groucho Marx nos regaló una a la que no puedo menos que recurrir, cuando al “Dr. Sánchez and Crew” tenga que hacer o haga referencia: “Estos son mis principios. Si no les gustan, tengo otros”, indudablemente principios, lo que son principios no muestran ninguno, cierto que de finales también parece adolecen, pues estos los deben de adoptar a cada situación momentánea, según esta se produce. Pasando del “donde dije, digo, Diego” a la misma velocidad, que cada escenario lo demande. Lo importante es mantenerse en el poder y por el poder, aunque en cada instante muestren y demuestren su más elemental falta de pudor (en mi opinión las cuatro acepciones del Mª. Moliner lo/s reflejan en su más fiel estado) de total impudor.

    Si bien la aspiración al poder de cualquier político que como tal se precie, es totalmente lícita, pierde toda legitimidad, cuando ese poder es alcanzado en base a falaces argumentos y a la más abyecta renuncia a elementales principios o concepciones preconizadas y no explícitamente negadas, al único y exclusivo fin de alcanzar a cualquier precio dicho poder: “del quítate tú, para ponerme yo”, tristemente soy experto de antiguo, no siendo menos experto a estas alturas del dicho: “le dijo la sartén al cazo, apártate que me ensucias”, pues de quedarme alguna duda, el “Dr. Sánchez and Crew”, me lo confirmaron con meridiana claridad. La sartén está aún más sucia que el cazo, que ya es decir…


    A quien carece de principios y esta carencia la muestra con total obscenidad, pedirle memoria de aseveraciones públicas suyas, es una forma como otra cualquiera de perder el tiempo. Recordarles el terrorismo de estado con nombre y apellidos “GAL”, no deja de ser meramente anecdótico, como la anteriormente señalada. ¿Qué decir de los pillajes a “fondos reservados”, del “convoluto” a lo Guido Brunner, Filesa, Malesa y Time – Export, etc., etc.? Como en el caso de la canción “…el paso del tiempo todo lo borra.” incluido el olor a la “carnada”, si la carnada es la del propio pescador. Pero… como los programas informáticos… las actualizaciones están ahí: los ERE andaluces con el correspondiente democrático reparto de dineros públicos, que por ser público, al decir de la entonces ministra de Cultura, hoy vicepresidenta y ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad del Gobierno de España: "Estamos manejando dinero público, y el dinero público no es de nadie”. De ahí ese su reparto con el tino democrático al que históricamente siempre hicieron los socialistas gala y desde que el socialismo existe: “billetes para asar una vaca”; “puticlubs para relajarse del estrés”; “esnifes”; etc., etc.

   El idioma español o castellano que hablamos las bestias, “dixit” ese mostrenco plantígrado que no rebuzna por falta de capacidad mental para expresarse en dos idiomas. Dada su antigüedad, evolución y riqueza, hace gala a muy atinados refranes, viniendo que ni al pelo el “dime con quién andas y te diré quién eres” (del verbo ser, y no Expediente de Regulación de Empleo amañado en la Consejería de Empleo Andaluza). Así, viendo las compañías del “Dr. Sánchez and Crew”, no cabe duda alguna que se trata de un auténtico hombre de estado o en estado y disposición de pretender perpetuarse en el poder, a costa de quien sea y de lo que sea. Por lo que vengo observando de su comportamiento, no me extrañaría que pidiese asesoría a los especialistas en la materia, Sres. Castrón sobreviviente en su finca caribeña de Cuba, homónimo banano podrido de MADURO, la no linda parejita de “nicas” “Dany & Chayo” o de aquel cara dura, que lo mismo le da “cagarla” con la “salida al Pacifico”, qué con el “Silala” o con el “bioceánico”. La cuestión es “cagarla” y perpetuarse en el poder. También es cierto, que salvo el “banano de MADURO podrido, que a cambio de los dividendos de la cocaína, concedió a los narcos, prácticamente un Estado, los otros tres “mandamases”, no hacen concesiones. Quieren mandar no gobernar ellos en todo el territorio nacional, a todo y al completo.

   Puede que en el fondo sean más ambiciosos que nuestro “Dr. Sánchez and Crew”. Él, más modesto, con tal de seguir viviendo de “papo”, sin pagar renta, electricidad, viajar en mystere y lucir gafas a lo piloto, puestas sobre el coco, lo comparte todo: incluida la soberanía del territorio de la nación más antigua de Europa. Contando para ello con la necesaria colaboración de los componentes de ese “Crew”, que tan claros ejemplos de probidad nos dan en sus actuaciones, ante esa entidad que “teóricamente somos todos”, aunque ciertamente que unos más que otros, y que los más creíamos que era cierto, hasta que una “toda” Sra. Abogada del Estado tuvo a bien aclararnos el equívoco en el que nos encontrábamos. Ese dicho es eso, un mero dicho o eslogan publicitario.

   Puede que por lo impresionable que soy, he de decir, que al margen de astronautas, doctores y otras habituales y normales actividades profesionales, lo que más me impresiona de los componentes del Consejo de Ministros, es el C.V. de la Excma. Sra. Vicepresidenta del Gobierno, sobre todo en su condición de docente. Condición que indudablemente colabora al alto nivel universitario, que nuestro país ostenta en los distintos rankings internacionales.

  Según el “cara dura del altiplano”, al pueblo le hay que dar lo que pide, y este pueblo al que yo pertenezco, en contra de lo que opina el Dr. Sánchez, pide elecciones tal cual él, en un día y quizás en hora tonta nos prometió.

                                 Capt. Willie

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