Cuatro Patas para el mismo banco…

    Hasta ahora, solía pedirles que aparte de vivir a costa de los impuestos que yo pago, las Sras. Bachelet (la Sra. amiga de Dª Estela Ortiz); Mogherini y Ponte, “dejasen de marear la perdiz” y condenasen alto y claro, actuando en consecuencia, contra esas TRES SANGUINARIAS DICTADURAS que asolan el mundo hispano: la finca caribeña del CASTRÓN sobreviviente. El gulag soviético instaurado por el genocida MADURO y acólitos en la Republica de Pobrezuela, antes de él y del “MONO ROJO” que le precedió, República de Venezuela. La “piñatería” de los no menos asesinos y genocidas DANIEL y CHAYO.

 

    Ante lo horrorizada que se presenta otra Sra. de bien vivir a costa de… Me veo en la necesidad de incluirla con la misma pretensión. Dª. Agnès Callamard, como asalariada, al igual que la Sra. Bachelet de ese “momio” conocido como Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), me “parece de perlas”, esa su “gran preocupación que manifiesta” por la detención de Julián Assange e hipotética conculcación de algunos de sus derechos fundamentales.

 

    Créanme amables lectores, que estas cuatro Sras. a las que habitualmente sigo en sus quehaceres, alícuotamente por mí y por Vds. retribuidos, siempre las leo u oigo preocuparse de cosas “importantísimas”: algo así, como sí las mariposas amarillas son deslumbradas por la luz, o no lo son.

 

 A mí como contribuyente nato a su buen vivir y tan profundo opinar, me preocupan mucho más cosas tan prosaicas como: la conculcación de todos los derechos habidos y por haber, incluidos algunos tan prosaicos como el derecho a poderse alimentar, curar o emigrar. CUBA, POBREZUELA, NICARAGUA. Llevar a referéndum el seguirles manteniendo y pagando sus magníficos sueldos y el “modus vivendi” a las citadas Sras.

 

    Sras. por favor, please, S'il vous plait, prego… ya está bien de tomarnos el pelo.

 

    A la vista de lo que antecede, amables lectores, van entendiendo y comprendiendo, esa mi continuada y manifiesta confianza en la ONU, la OTRA, la de MÁS ALLÁ y todas las moscas y moscones que a sus panales acuden y “mielean”.

 

     “Déjense de marear la perdiz” y “jodernos”, justifiquen aunque sea un mínimo, la “pitanza” que nos sacan.

 

    Infórmense sobre la gran preocupación de esta última, entendiendo asimismo, la opinión que algunas veces vierto sobre ciertos campus universitarios, de la en otra hora libérrima USA. Conste que esto no lo trajo Mr. Trump, lo trajeron y asentaron los “estulto pijo progres” representados por el “buen musulmán” y “democráticos” afines.

 

                                                             Capt. Willie