En círculos próximos a mi intimidad, se me
acusa de confusionismo a la hora de aceptar posicionamientos ético – morales –
sociales, sobre todo, cuando se trata de llamar por su nombre y definir
conceptos tan antiguos como la propia vida sobre el Planeta Azul, del que formo
parte y arte.
Aquellos que hayan tenido ocasión de
conocerme en las dos principales facetas en las que mi vida se desarrolló, bien
saben de mi forma de pensar y actuar. Pensamiento y actuación, que siempre y
dentro de las múltiples equivocaciones en las que pudiese haber incurrido, en
todos los casos estuvieron precedidas por el máximo respeto a las personas y al
entorno en el que en cada momento mi vida se encontraba inmersa. Extremo éste,
que salvo por algún mal perdedor resentido y/o inducido, a pesar de los
comentarios laudatorios retirados (ninguno reprobatorio) del presente blog, los
que por presiones de los emisores, me vi obligado a dejar, dan idea por sí
mismos, no fe, al menos de los afectos que coseché en esas mis variopintas actuaciones
en los referidos micro - mundos en los que me meneé.
Para los que casualmente accedan al
presente blog en este mismo escrito, a fin de que se ubiquen, les sugiero echen
un vistazo a los siguientes links, conductores a los que humildemente por lo
polémicos, son lo más representativo de mí pensar y actuar:
viernes, abril 28, 2017Respuesta a vuestro comentario que antecede…
domingo, junio 19, 2016
No
quisiese llegar a clasificar a las personas por colectivos…
lunes, junio 13, 2016
Ante una
masacre… a quien le importa la orientación sexual de los asesinados.
martes, mayo 31, 2016
Dónde
empieza la libertad de pensamiento – expresión y la apología del terrorismo…
miércoles, diciembre 16, 2015
Desde
el horror de lo inevitable… Al error de no evitarlo…
La
irracionalidad y el anti…
Como siempre que me veo ante comportamientos
humanos no asumibles, necesito un mínimo tiempo de reacción, que me permita
reflexionar y no caer de forma inmediata en el fácil “ojo por ojo y diente
por diente”, pues aunque el “poner la otra mejilla”, en teoría,
sería la solución alternativa, mi condición humana me obliga a esa reflexión
previa. Con independencia de mis creencias, convicciones y vínculos familiares,
si hay algo que rompe mi lógica y a lo que no me puedo enfrentar, es a
la irracionalidad, venga de donde venga y actué contra quien actué. Puede que
mis ingénitos principios siempre me
predispongan a favor o pro, contadas y muy justificadas veces, en contra o
anti. Pudiendo racionalizar y explicar perfectamente, esas escasas peripecias que
me inducen a las segundas inclinaciones.
Al margen de mi total adhesión y profunda fe
en los enunciados y dificilísima práctica que se desprenden de esa secta
judaica, a la que accedí por el bautismo y libremente me adherí. El
Cristianismo y más específicamente el Catolicismo. Como judío, cuando tuve que
cumplir con mis obligaciones al respecto, lo hice sin dudar ni eludir
responsabilidad alguna. Hecho este, que siempre me concedió la capacidad moral
para poder opinar por encima de tabús y convencionalismos. Idéntica
independencia obtuve en el plano político, ya que mientras otros, hoy olvidadizos,
se acogieron y gozaron de “canonjías” a diestra y siniestra, dada mi “siniestralidad”
dentro de la racionalidad, me hicieron evolucionar a un liberalismo, no de
salón, donde la libertad en todos los ámbitos de la vida, está por encima de las
tradicionales cortapisas, pero siempre subordinada al derecho natural, en el
sentido más amplio “Marcotuliano - Cicerónnesco”, con el respeto debido al que opina
y actúa de forma distinta a nosotros. Pero… ojo, sin capacidad de imposición de
su opinión y/o actuación sobre nada ni nadie.
Dado que reiterada y reiterativamente
siempre hago referencia a la Civilización Occidental Cristiana y a lo
inmiscible de dicha concepción de vida, con aquella otra que tiene su inicio
619 años más tarde (con la recepción de la profecía por Mahoma). Con auténtica ignorancia
en algunos casos y, en la gran mayoría de ellos, con auténtica mala fe o espurios
(2ª. Acepción del Mª. Moliner) intereses de índole político o “petrodolárico”,
que en definitiva son los mismos, me veo acusado de “Islamofobia”,
cuando realmente lo que tendrían que llamarme es “conocedor real de la
historia del islam y su evolución hasta nuestros días”. Conocimiento que
extrapolo a la cultura Hebraica y Greco – Latina. Hecho este que una vez más me
hace reafirmarme en conjeturar sobre ese mundo menos malo, que surgió, fruto del
monoteísmo hebraico, de la filosofía griega y del derecho romano.
Para que
no puedan surgir ni dar lugar a falsas interpretaciones, aclarar: que
todo crimen, cometido por y donde sea, tiene de antemano mi total condena. Con
la misma rotundidad, que reitero mi negación a aceptar el arrepentimiento como atenuante
a los delitos de sangre y, en ningún caso a aquellos que sean premeditados y
con alevosía, se amparen en ideas, sean éstas de carácter político y/o
religioso. Así condené y condeno todo atentado o crimen realizado por cristianos,
judíos, musulmanes o ácratas.
Por ello y, aunque la distorsionada historiografía
antigua y contemporánea me hace saber y conocer, que los judíos, como tal y por
el hecho de serlo (otra explicación no encontré a pesar de buscarla durante
años) carecemos de los derechos que merecen otros grupos étnicos. Por sí
justifican el que el primer hijo de su Sra. mamá, pueda poner en cuestión nuestros
derechos ciudadanos y lo que es peor, el más elemental de los derechos humanos,
la vida. Esto no es achacable a la vieja Europa, es una enfermedad que se
extendió incluso al nuevo mundo. Así un loco o hijo de P… el 28 de octubre de 2018,
asesina en Pittsburg PA a once personas y deja heridas a un indeterminado
número de ellas; como son judíos y ¡mataron a Cristo…! Otro H. de P., recientemente
en la sinagoga de Chabad of Poway CA asesina a una mujer y
deja malherida a una niña y a un varón. Cierto que este mal nacido, también intentó
atentar contra una mezquita, gracias a Él infructuosamente.
En esta, como en todas las ocasiones, cuando
la maldad de los hombres o la naturaleza incontrolada actúa ocasionando víctimas:
a Él en humilde súplica recurro, pidiendo acoja en su protector seno a las víctimas,
procurando consuelo a sus deudos.
Cuando a los
rojos bermellón, les asusta el color rojo sangre…
Nos tocan vivir eso… tiempos donde ya no se
distingue un desvergonzado majadero de tipo convencional, de otro tan sinvergüenza
y majadero como el anterior, pero contagiado de progresista y camino de obtener
el accésit a “estulto pijo progre”, camino y encaminado al “cum laude”, vamos…
de no saber, si ponerse a servirse a sí mismo o buscar criada que le sirva a él,
en esa su desenfrenada carrera contra reloj, por “joder” lo que sea y a quien sea
y pueda. La cuestión es joder a alguien y algo: habitualmente dinero y el poder
que dicho dinero compra. Eso sí, siempre y en todos los casos pretendiendo
alcanzar la sublimidad en lo concerniente a la “corrección política”, la
“progresía”, “buenismo”, “papanatismo” y el atentado contra los más elementales
principios de la libertad ajena; la de ellos es sagrada y como tal de obligado
respeto y consideración.
En la “loca carrera” a la que se hace
referencia, ya no caben diferencias ni diferenciaciones. Participan las más
altas autoridades políticas, religiosas y económico – sociales, pues la “arrebatiña”
o “chuña” de los tres estamentos citados, sigue el principio que se desprende
de la fábula “Un panal de rica miel”, de Félix M. Samaniego. Entrando en la
dicha disputa entre los unos y los otros y a ver quién es más desvergonzado,
encubriendo su desvergüenza en esa progresía hipócrita, en ese “estultismo pijo
progre”, al que aspira todo “rojo bermellón”, incluyendo al obispo de Roma,
quien no duda en dejar con el “culo al aire” a sus homólogos venezolanos y lo
que es peor a todo un pueblo, que cuando consiga liberarse del trio de
genocidas, encabezado por Maduro, Cabello y Delcy, puede que pidan
responsabilidades penales a los encubridores, entre los cuales a parte del
citado “Pampero Peronista” y su desconocedor Secretario de la situación en
Pobrezuela, P. Parolín, se la pedirán también a esas insignes Sras. tan
preocupadas ellas por los crímenes de exterminio de la población, por falta de
los más elementales: alimentos, medicamentos y servicios.
Estoy esperando y creo que necesitaré un
taburete conformado por tres patas, que deseo no sean como las que forman y conforman
las Sras. antes referidas y ahora citadas: Bachelet, Mogherini y Ponte. Para poderme sentar y no
cansarme de esperar, que se dejen de hacer la del “Peronista” y Secretario.
Pues al margen de otros como el “Príncipe” de la asesina de Delcy Rodríguez,
como buenos “rojos bermellón”, les horripila el color “rojo sangre”, no el azul
que da la desnutrición sobre la piel de los desnutridos. De ahí el gran miedo a
que corra la sangre en Pobrezuela, no sea cosa de que la sangre a correr, sea
la de los genocidas exterminadores, sus contribuyentes natos. Pues para
alimentos, medicinas y servicios no hay fondos, pero sí sobran para comprar
voluntades y alcahuetes.
Claro está, cuando llegado el momento al que
están llevando las cosas los genocidas y sus alcahuetes, a los primeros se les
aplique la “ley de fugas”, estos mismos alcahuetes que ignoran la presencia de “comisarios
políticos” cubanos, nicaragüenses y algún que otro “asesor” representante del “autogolpista”
y aspirante al sultanato Recep Tayyip Erdoğan, al que ignoro quien le dio vela en este monumental
entierro. Entierro, que más antes que después, tendrá él mismo y en su misma
casa.
Que el “sonriente chinito” y el “propietario” de lo que queda del
antiguo imperio ruso, traten de aguantar el genocidio, es a su vez lógico, pues
también sacan la correspondiente tajada. Lo que puede pasarles, es que lo mismo
que a los “enanos” (hoy hago una excepción) y “enanas” en los párrafos anteriores
citados/as, se les atragante el bocado. Pues los unos, los otros y otras, no se
percataron de que en el mundo actual, sus “friends” están en minoría y que detrás de Pobrezuela va
la finca cubana y los canallas, ladrones y genocidas, de la linda parejita Dany
& Chayo. Entonces a los unos, las otras y los de más allá, solamente les
quedará pedir y tratar de exigir la justicia, que para los inocentes a gritos
les negaron.
Me resulta repulsivo que pase por mi cabeza la aceptación de la “Ley de
fugas” aplicada, aunque sea a genocidas como los que menciono, pero a esa
indeseable solución están conduciendo la situación ese grupo de cobardes, que
pudiendo colaborar con la práctica totalidad de Presidentes democráticos del
continente americano, se escudan en formalismos para seguir “”chupando de la
piragua, hasta que se seque por completo.
Llegado ese momento, no seré yo
solo quien les acuse por cobardes y desvergonzados. Seremos muchos los que les
recordemos la ignominia en la que están cayendo y la que están amparando.
Vds. son y serán los culpables de la sangre que no se derrame, pero que por
falta de alimentos, fármacos y servicios, la inanición campe a sus anchas. Así
las cosas, creo amable lector que empiece a comprender mi “total confianza”, en
la ONU, la OTRA y la de MAS ALLÁ, y sobre todo en los cargos de responsabilidad de esos inútiles
y costosos organismos internacionales, incluida la Iglesia Católica Apostólica
y Romana. ¿En manos de quien estamos…?
Capt. Willie
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