Coincidencia de efemérides…

      El pasado día cinco se cumplieron los 25 años del fallecimiento del Rvdo. P. Pedro Arrupe Gondra, S.J., quien ocupó el cargo de 28º prepósito de la Compañía de Jesús, entre el 22 de mayo de 1965 y el 3 de septiembre de 1983. (Sin perjuicio, que el Okupa de los Altares le impusiese un Comisario Político a partir de 1981. Muy propio de los anti – comunistas). Fecha, donde oficialmente fue sustituido por Rvd. P. Peter Kolvenbach, S J.

       Esta efeméride coincide en el tiempo, con la apertura de un resquicio, a la extradición por EE.UU. de América a España, del en otra hora Viceministro de Seguridad Salvadoreño, Inocente Orlando Montano (perteneciente a la promoción de 1966 de la E.M., conocida vulgarmente como la Tandona*)  quien deberá responder ante los tribunales españoles de la grave acusación por la presunta participación en el plan de ejecución y ocultación del asesinato de los sacerdotes jesuitas: Ignacio Ellacuría; Ignacio Marín – Baró; Segundo Montes; Juan R. Moreno; Armando López y Joaquín López López , de la doméstica Elba Ramos y de su hija Celina.

         Ciertamente se hace difícil aceptar el asesinato y más aún la impunidad del mismo; no obstante la Compañía de Jesús, con asumida amargura tiene por tradición el poner los mártires en toda revolución que se preste. Pues la misma querida tierra Salvadoreña, doce años antes, fue también regada con la sangre del P. Rutilio Grande García S.J., quien en su discreción, dulce y pausado tono de voz, haciendo honor a su compromiso con la letra y espíritu de la CG XXXII  1974 – 1975. No dudó en consolidar las Comunidades Eclesiales de Base (CEB) y lo que era aún peor visto por la oligarquía terrateniente salvadoreña, la formación de sus líderes, los denominados  Delegados de la Palabra. Aun hoy, casi cuarenta y cinco años después de mí última conversación con él, hablar o escribir del P. Rutilio, me produce un nudo en la garganta y se me llenan los ojos de lágrimas.

(*) La “Tandona” de infausto recuerdo en la pasada guerra civil salvadoreña, fue una promoción de la E.M. que por lo numerosa, salieron egresados 47 Oficiales, cuando lo normal es que las distintas promociones estuviesen compuestas por una veintena.

To be continued…

                          Capt. Willie