¿Dónde empieza la capacidad virtual de desvirtuar los hechos tangibles…?

    Puede que la tangibilidad, en su calidad de tangible (del lat. Tangibĭlis), en su concepción de “real y no ilusorio”, sea un término, “que tomado al pie de la letra” solamente es aplicable a cosa física, de ahí que cuando algunos hablan de comportamientos humanos, sean estos de índole religioso – cultural o consiguiente tolerancia, eviten deliberadamente conceptos inteligibles, para enmascararlos en tópicos cargados con todo tipo de subterfugios y transformar una realidad cotidiana en una entelequia o ilusión de orden virtual.

 

     La vida que me tocó vivir y las vueltas y revueltas que ella me hizo dar, me aproximó en más ocasiones de las que tal vez quisiese, a vivir entre poblaciones musulmanas, chiíes, sunís alauitas, alawitas, drusos y en algunos casos salafistas. Curiosa, e independientemente de las afirmaciones que a continuación pueda verter, debo afirmar, que de muy antiguo poseo amigos de religión musulmana, algunos de los cuales, a través de los años, alcanzaron altas graduaciones militares en sus respectivos países.

     Cuando al que esto suscribe, “expertos” y “doctos” de todo tipo (incluso algún que otro cretino “dioce”, al que le permiten opinar en prensa, mor a la mordida que significa cierta publicación y distribución, que solamente ellos leen), le hablan de la tolerancia del Islán en sus distintas ramas y estado, únicamente puede mostrar perplejidad, surgiéndole de entrada una serie de preguntas, a las que sistemáticamente ninguno de esos “expertos” da respuesta.  

    Sin perjuicio a posteriores matizaciones, les quedaría sumamente agradecido a la “premiada” y al “dioce”, desconocedor de casi todo (salvo del bable y el mandarín), si me pudiesen decir: En cuántos países de religión mayoritariamente musulmana, se permite la edición en árabe del “Tanaj” (Tora, Neviim y Ketuvim); el Antiguo Testamento bien en cualesquiera de los distintos cánones del cristianismo (39, 46 o 51)y Qué me dicen de la publicación de la Biblia en idioma Árabe.

    Dentro de esa total tolerancia del Islam, a la que la “una” y el “otro” hacen referencia: ¿Podrían indicarme en cuantos países está prohibido el establecimiento de iglesias cristianas o sinagogas judías?

    Qué el estado islámico no representa ni expresa los ideales del Islam, es posible hasta cierto punto, pero que la tolerancia del Islam, salvo en el caso de los “drusos”,  el resto de las creencias deja bastante que desear, solamente lo ignoran todos aquellos que sus grados, post grados y doctorados, son pagados subrepticiamente con “petrodólares”. “Petrodólares”, de los que salvo los actuales “Pobrezolanos”, el resto de nuestros hermanos Sur y Centro Americanos, siempre carecieron; de ahí que cuando llegan a controles de emigración, sean marítimos, aéreos o terrestres, se les rechace. Su similitud cultural occidental, a la nuestra, es secundaria, no llega ni a accesoria. Claro, son poco exóticos: suelen ser cristianos, hablar español o portugués y no precisan construir grandes “mezquitas”. Son pobres y detrás de ellos, lo más que puede existir es un gran terrateniente o capitalista, que no sabe ni quiere saber, nada de su existencia.

    Si la “premiada” y “el lameculos” hablan de “miedo fóbico”, ignoro la aplicación que ambos le dan al término. Pero los que no tenemos ni filias ni fobias, nos preguntamos y les preguntamos a los “buenistas”, “papanatas”, “robaperas” y demás especias próximas o encuadradas dentro de los “Estulto Pijos Progres”: ¿Son conscientes del porqué tomar la dirección Norte, esas masivas emigraciones musulmanas, y no el Sur? Que el que esto suscribe sepa, los grifos de oro y otras “lindezas” similares, se encuentran al Sur del cuenco mediterráneo, y para más INRI (pero de “inritacion”), no fóbica, son países no poblados por “infieles”. ¿Acaso a esta pareja de dos nunca les llamaron infieles? A mí sí. Muchas veces y en algunos de los casos con grave riesgo para mi vida.

    Una vez más me repito, aunque el “buenismo”, “papanatismo”, “diarrea mental”, “progresía”, “estultismo pijo progre”, “corrección política” y “lameculismo” al Peronista, lleve a “cagar reiteradamente fuera de la pota”, ya está bien de tratar de hacernos comulgar con ruedas de molino. Busquen, del verbo buscar, la palabra proselitismo y lo que significa “la guerra al infiel”. Cuando lleguen a comprender su verdadero significado, hablen.

     A la vez les recuerdo a unos a otros y a los de más allá, que en la Alemania de la “Kartofelera”, tuvieron que tomar medidas contra los musulmanes refugiados que maltrataban a los cristianos. ¿Sabían el uno y el otro de dichas agresiones y maltratos? ¿Quién y cuándo, alguien de todos esos “buenistas” y “robaperas”, me dará respuesta a los resultados de las autopsias realizadas a los cadáveres recogidos en las costas Norte del cuenco mediterráneo? Mi pregunta, reiteradamente realizada, es: ¿Cuántos cadáveres recogidos no muertos por sumersión y asfixia, estaban sin circuncidar los varones y con el clítoris extirpado las mujeres?

     Cuando la ICAR y sus “mamurrias” se ponen a hacer “buenismo”, se olvidan que dentro de la misma están muy dignas y sacrificadas iglesias Orientales Cristianas y Católicas, que de tolerancia tienen la experiencia acumulativa que les retrotrae a mediados del siglo VII. Sí, es cierto que a unos y a otros, ambas les importan un carajo. Su capacidad económica es prácticamente nula y el resto es secundario. Se necesitan mártires por la fe, para que esta no decaiga. Hablar de la tolerancia del Andalus a estas alturas de la historia. ¡Tiene “bemoles”!

    Sucumbir es jodido, pero si encima se hace bombardeado por el “fuego amigo”, la “jodedura” se hace mayor. ¿Quiénes sucumben? Los Cristianos Orientales, los Occidentales y todo aquel que sea infiel o se asemeje a ellos.

    Por último recordarles a ambos, “robaperas” y afines, que la actual Siria, a destruir con el beneplácito de los unos y de los otros, era un lugar donde en algunas ocasiones el “imán” disponía de la llave de acceso a la iglesia Católica, y previa acreditación del orden poseído, tras explicar donde estaban las luces y elementos de culto, permitía celebrar la eucaristía. ¿Les suena de algo este hecho a los “robaperas”, “lameculos” y demás especies afines?

                         Capt. Willie