Cuando cierta prensa dejó de ser “amarilla” para ser directamente roja…

    Soy consciente de que las “fake news”, son una cosa y en grado supino las opiniones vertidas por el “He’s  a nobody Rabago”. Solamente que las de este, como él, “auténticamente mierdosas” y si cabe totalmente biliosas. Sí Mr. Donald Trump no existiese, los primeros y “He’s a nobody”, tendrían que inventarlo, pues si no ¿de qué comerían ellos…?

 

   Vivimos momentos donde todo está trastocado: el comunismo y el socialismo (dos patas del mismo banco), cantan a puño cerrado (no se les escape lo pillado) levantado, la Internacional. Su internacionalismo empieza y termina bajándose los pantalones, bragas o calzoncillos ante el primer nacionalista supremacista, que pretende dividir los pueblos por barrios o calles, en función de distinguir a los que pagan (“paganinis natos”) de los que roban y derrochan a costa de los anteriores. Robo y derroche amparado por esos internacionalistas venidos a menos o a casi nada: comunistas y socialistas. Pero en esto como en el resto de las barrabasadas, ¿va a quedar atrás la derecha…? ¡Tomad dinero, derrochadlo o simplemente robadlo, que para eso os lo damos…! Andorra la Vella está cerca y sus bancos sedientos de Euros.

   En esto del trastoque, la ICAR en su parte humana y terrenal, tampoco puede quedarse atrás. De ahí qué de modo claro y adaptado a los tiempos que nos tocan vivir, se apresurase al acomodo y para sobrevivir preservando alguno de los privilegios de índole económico (los importantes), se vuelca en obras terrenas de misericordia con los inmigrantes, con manifiesta renuncia a su lema fundacional: «hacer discípulos, bautizándolos en el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo». Parece ser, que al carecer de registros sonoros de lo que dijo o pudo decir al respecto, el hijo de Dios hecho hombre, Jesús, el judío, la salvación de las almas dejó de ser primordial, ya que como un “CRETINO”, con mayúsculas, me afirmó: No se puede hacer proselitismo. Hay que hacer “pendejismo”, que es la política imperante desde la llegada del “Peronista and Boys”.

 

   Lo cierto es que nos estamos moviendo en lo más próximo a la NADA, recurriendo para ello a conceptos muy primarios, a fin de podernos aproximar a ella, a esa NADA, al alimón: antología; existencialismo; matemáticas – física. Vamos, “purititita” mierda.

 

   El “periodismo amarillo” que nace de las cabeceras de los neoyorquinos “New York World” y su igual el “New York Journal”, propiedad de los magnates, Joshep Pulitzer y de Williams R. Hearts (“Ciudadano Kane”), se caracterizaron a cual más, por la invención y/o amaño de noticias, o adaptación de las mismas a los propios intereses de sus propietarios o afines. Pero lo que les dio el popular calificativo de “amarillos”, fueron las “tiras” incluidas en sus suplementos, donde con dibujos caricaturescos y escaso texto, se trataba de llegar a todos los miembros de aquellos núcleos sociales, donde el conocimiento del idioma inglés era escaso. La imagen «the yellow kid»“el niño amarillo”, personaje creado por el “disputado” dibujante y guionista Richard Felton Outcauld. Un golfillo pelón, desdentado, vestido con un sayal, a posteriori coloreado de amarillo.

 

    Este “personaje” ya famoso, al fichar su creador y dibujante por el New York Journal, fue sustituido en la competencia por otro de similares características y formas. Salido de la pluma del guionista y dibujante George Luks, tan descarado como su predecesor y bajo el nombre de «Hogan´s Alley» “Callejon de Hogan”. El color amarillo, ya lo tenían, lo único que faltaba era definir el “sinvergoncismo” de ambos editores: Pulitzer y Hearts, Hearts y Pulitzer, así como de la caterva de desvergonzados colaboradores de que ambos disponían y, por extensión los panfletos que editaban. Así en 1898, Erwin Wardman, editor a su vez del serio diario New York Press, juzgó y sentenció a ambos “panfletarios tabloides” carentes de todo rigor, veracidad y seriedad, de amarillos. Jugando con las múltiples acepciones del término “yellow”, dando como resultado la frase «We called them Yellow because they are Yellow» “Los llamaremos amarillos por ser escagarruciados”.

 

    Aclarado el escagarrucio o escagalurcio de aquellos “serios y profesionales periodistas”, entiendo y comprendo que tras el paso del “Buen Musulmán”, al decir de su abuela paterna, por la Casa Blanca y, la de las anchas espaldas de estibador portuario, de la que se hace acompañar, que por no  ser racista, a los “caucasianos” nos llama “blanquitos”, el mundo en su lógica evolución, retrocedió unos cientos de años. Los años que van desde los USA, que unas veces equivocadamente y otras acertando, por tener un diáfano concepto de la libertad en el más amplio sentido del término y mal que a los “rojos encubiertos” (ahora no son comunistas y mucho menos internacionalistas, son meros y simples parásitos sociales, pancistas) les pese, iban a todas y a por todas.

 

    Cierto que a por todas iba el marido, boy friend o lo que sea, de la que debía de haber ganado las elecciones y las perdió frente a Mr. Donald Trump. Prueba de ello, que en pelo no reparaba, la becaria. Qué al hormigón no le hacía ascos: los mil quinientos kilómetros de muro separador entre los EE.UU. Mexicanos y los homónimos del Norte, construidos en sus dos presidencias. Qué jodido, tenía tiempo para todo, incluido para oír las “cantatas” que le dedicaba aquella Sra. un poco gorda y sonriente, llamada por su americanizado nombre de Madeleine Albright. Dicha Sra. iba y venía, según ella, camino de solucionar el conflicto de Oriente Medio. Que Corea del Norte firmara (pero nunca cumpliese un acuerdo que dejase en vía muerta su programa nuclear), a la vez que si el mundo no paso a ser un idílico cuento de Hadas, donde ella o la que perdió las elecciones serían las Madrinas, fue por culpa del “maligno” Mr. George W Bush, que cuando la “amistosa” Corea del Norte consiguió comprar de “extranjis” propulsores, puesto que el material fisible ya lo poseía, en vez de conformarse con fabricar “pacificas bombas atómicas”, a criterio de la mencionada Sra. y de su jefe, el Sr. aquel aficionado a meter mano a fandango ajeno, le dio por hacer misiles intercontinentales y,  para más joderla, probarlos.

 

   Tras lo anteriormente dicho y con G. W. Bush en la Casa Blanca y los Secretarios de Estado Mr. Colin Powell y Mrs. Condoleezza Rice, las cosas se “torcieron muchísimo”. A donde vamos a parar con esos derechistas, “creadores” de la fábula del “armamento de destrucción masiva”, en posesión de aquella “hermanita de la caridad”, llamada Sadam Hussein. El mismo, que entre las 16,20 horas del día 16 y las 19,45 del 19 de marzo de 1988, creyendo que les arrojaba “confeti”, larga sobre la población de Halabja, toneladas de gas mostaza, sarín, tavun, etc.  De acuerdo al informe de Mr. Pascal Zanders, del Proyecto de Guerra Química y Biológica en el Instituto Internacional para la Paz de Estocolmo “SIPRI”, no cabe duda alguna de quien fue el causante de dicho ataque, ni los “confetis” y su composición, que ocasionaron del orden de 6000 víctimas civiles, en su mayoría mujeres, niños y ancianos.

 

   También es cierto, que esos “derechistas”, “derechones” o “derechazos”, “fabuladores”, se “sacaron de la manga” la existencia del hipotético arsenal de armas de destrucción masiva, en manos de las hermanitas de la caridad o “nuns” Sadam Husein y su colega  Ali Hassan al-Mayid, más conocido por “Ali el químico”, pues ellos dos nunca “jugaron de farol” ni amenazaron con dicho arsenal y su capacidad tóxica. A la vez que “pacíficos países no alineados” ¡joder, sí lo llegan a estar…! cuando se les consulta llegado un momento dado, sobre los posibles suministros y cuantías de agentes químicos precursores en el desarrollo de venenos nerviosos, no supieron o no respondieron. Solamente se pudieron cuantificar las cantidades suministradas por Alemania y los USA. Descontadas a estas cantidades controladas, las utilizadas sobre la anterior citada población de Halabja, no hay que ser de derechas, pero tampoco muy listo, para darse cuenta de que esos “no alineados”, si estaban o habían estado sumamente activos en el suministro de esos precursores. ¿En qué cuantía…? Nunca la dijeron y creo, sin lugar a dudas, que nunca la dirán. Friend is friend, business is business…

 

   Hasta aquí las “cagadas” de la derechona según los practicantes del “hijoputismo lirico”. ¿Qué decir de las “cagadas y meadas” del “buen musulmán”, que con su total ineptitud y la de la bola de objetes “estulto pijo progres” de los que estuvo rodeado, consiguieron convertir las “primaveras árabes” en “árticos y antárticos inviernos”, cuyas consecuencias estamos pagando ahora? Y las que te rondaré roja. Lo de morena quedó obsoleto.

 

   Hablar de la prensa en este momento y en general tildarla de amarillismo, es un puro e infantil eufemismo. Lo mismo que llamar periodistas a la gran mayoría de “entintadores de papel”, o a los “empantalladores de medios digitales”, lo malo es que en la actualidad, al carecer del homónimo a Mr. Erwin Wardman, debemos de conformarnos con sentir vergüenza ajena de la total desvergüenza a la que hacen gala, esos prostituidos escribidores.

 

    Lógicamente, cuando ahora nos hablan de populismos los padres putativos de ellos, me permito preguntarles a esos lacayos suyos propagadores de falsas noticias ¿Sois conscientes de la mierda que trajisteis a este mundo? Con estas y con todas, cuando se les incluye como miembros distinguidos del “hijoputismo lírico” se ofenden. Son muy sensibleros los chicos.

 

                                 Capt. Willie